El PIB de Argentina crece al mayor ritmo desde 2020
Parece que las buenas noticias se acumulan para la economía argentina. Las primeras estimaciones del PIB en el tercer trimestre de 2024 son muy buenas, mejores incluso de lo esperado.
Cada vez existen menos dudas sobre el buen hacer macroeconómico de Argentina en el primer año del Gobierno de Milei.
El crecimiento del PIB argentino en perspectiva
La economía argentina se expandió un 3.9% en el tercer trimestre del año 2024 en comparación con el segundo trimestre de ese mismo año. Esta es una expansión mayúscula, no vista desde el rebote de actividad de finales del año 2020 (cifra muy influida por la recesión COVID).
En términos trimestrales, y enfocándonos en los últimos años de Argentina, parece que los problemas económicos empezaron a finales de 2022, se repitieron durante todo 2023 y la tendencia continuó durante los dos primeros trimestres del gobierno de Milei (debido a los enormes ajustes macroeconómicos llevados a cabo que evitaron la hiperinflación y el default de deuda).
Visto el crecimiento de Argentina en perspectiva, no cabe duda de que el gobierno de Milei enfrentó una recesión, pero es muy dudoso de que podamos establecer el inicio de los problemas económicos en el Gobierno de Milei.
Por otro lado, el crecimiento del tercer trimestre marca el final de la recesión argentina, de hecho, el PIB se coloca en el tercer trimestre de 2024 casi en el mismo lugar que en el cuarto trimestre de 2023, momento en el que Milei tomo las riendas del gobierno argentino.
Quedará por ver, por supuesto, si este crecimiento económico se consolida en el cuarto trimestre de 2024, cosa que, con los indicadores de actividad adelantados en la mano parece que sí ocurrirá.
El PIB crece más de lo esperado
Adicionalmente, el PIB de Argentina muestra un crecimiento en el tercer trimestre de 2024 mayor a lo que podríamos haber esperado mirando al EMAE (indicador adelantado de actividad económica más parecido al PIB).
Tanto la construcción como la producción industrial venían marcando un fuerte crecimiento de la actividad económica, tal y como finalmente ha ocurrido.
Crecimiento/caída por sector
Si analizamos el crecimiento del PIB por sector económico (en términos interanuales esta vez), vemos como la agricultura brilla con especial fuerza. Esto es debido a la recuperación de la cosecha en el año 2024 después de la sequía del año 2023.
Pero, en comparación con los datos de anteriores trimestres, encontramos más sectores económicos que ahora crecen y antes no lo hacían.
Por el lado de las caídas, encontramos a los sectores típicamente más afectados en recesiones, construcción, industria y finanzas. A pesar de ello, ya hemos visto que en términos trimestrales tanto la industrial como la construcción crecen con fuerza (aunque en el cómputo de todo el año todavía se encuentren en terreno negativo).
El crecimiento se explica por incremento en la formación de capital mientras el Estado se retira de la economía
La formación brutal de capital fijo había sufrido de sobremanera en los trimestres pasados (como suele ser habitual en una recesión económica). En este tercer trimestre del año, el principal impulsor del crecimiento económico ha sido esta inversión en capital fijo que crece nada menos que un 12% con respecto a la cifra registrada en el trimestre anterior.
También es de destacar el aporte apenas nulo del consumo público en el crecimiento económico de Argentina. El buen dato de crecimiento económico está ocurriendo, a diferencia de lo que ocurría en el kirchnerismo, sin incremento del consumo público.
Conclusión
La economía argentina brilla en el tercer trimestre de 2024, tanto es así que recupera prácticamente todo el terreno perdido en los dos primeros trimestres del año.
Ante esta situación, las posibilidades de que el año 2024 termine con crecimiento económico empiezan a ser verdaderamente grandes (a pesar de que prácticamente nadie apostaba por ello a inicios del año).
AVISO IMPORTANTE: El análisis contenido en este artículo es obra exclusiva de su autor. Las aseveraciones realizadas no son necesariamente compartidas ni son la postura oficial de la UFM.